Dudo que Emiliano García Page conozca Villaescusa de Haro. Durante esta legislatura ni él ni ningún miembro del ejecutivo regional del PSOE ha pisado nuestro pueblo; tan solo la directora general de programas de empleo para la firma de un convenio de, a priori, poca utilidad práctica. Y si Page conoce nuestro pueblo, la verdad, no hace mucho por apreciarlo.
Hace unos meses se publicó una convocatoria de subvenciones para rehabilitación de patrimonio y recursos turísticos enfocada principalmente a zonas ITI, comarcas que sufren despoblamiento y declive socioeconómico. Los representantes de muchos pueblos como Villaescusa de Haro, con población a la baja y un gran patrimonio que mantener y realzar, quedamos absortos ante este canto de sirenas que la JCCM anunció como un maná. Presentamos dos proyectos; por un lado, la cuarta fase de “Los Frailes” que permitiría poner el edificio a punto para su apertura al público y, por otro, un proyecto de menor cuantía para la conservación de la fachada exterior de la Casa Grande.
Recientemente se ha publicado la resolución provisional y, por desgracia, Page no ha tenido a bien conceder ninguna de las dos ayudas. Como en cualquier otra convocatoria pública hay proyectos que se estiman y otros que no por la limitación presupuestaria. No obstante, lo deprimente de esta resolución es que en el Programa 1 (al que se propuso el proyecto de “Los Frailes”) se presentaron treinta proyectos de zonas ITI y tan solo dos han sido desestimados, entre ellos el nuestro. Por cierto, ambos en la provincia de Cuenca, lo que deja en bastante mal lugar la intercesión del Delegado Provincial por su propia provincia. La arbitrariedad en la baremación resulta tan peliaguda que sigo sin poder asimilar que no se estime un proyecto que permite la apertura al público, y consiguiente explotación turística, de nuestra singular iglesia.
En el fondo no me sorprende porque, como he introducido, Page no ha hecho mucho aprecio por nuestro pueblo en estos cuatro años de legislatura socialista. La carretera regional que nos une con Rada de Haro y La Alberca de Záncara sigue en un estado tan deplorable que ya ni la hace merecedora de llamarse “carretera” a pesar de la insistencia con la que todos los ayuntamientos implicados rogamos su arreglo y de las vaporosas promesas del ejecutivo regional. Su falta de aprecio llega a tal punto que la JCCM ni siquiera estimó conveniente realizar una simbólica aportación económica a las Jornadas Cervantinas en honor a Astrana Marín que se llevaron a cabo en el aniversario de la publicación del Quijote. Cuatro años y ni siquiera un gesto, aunque todavía quedan tres meses para poder visitarnos y explicar a los vecinos porqué las “subvenciones ITI” llueven lejos de aquí y porqué seguimos “disfrutando” de la peor carretera de Castilla-La Mancha.
Durante la campaña electoral que se avecina supongo que Page y el PSOE venderán y ensalzarán la gran inversión que han realizado en Villaescusa de Haro durante esta legislatura: el hito informativo metálico de la parada de autobuses.